CRISTO JESÚS / BUDHA

Después de pasar la Semana Santa y disfrutar de las magníficas imágenes en la calle, siendo un lujo poder disfrutar de tallas de gran valor, música, comidas, dulces, buen ambiente... Toda una semana repleta de tradición, me gustaría nos paráramos un momento para acercarnos un poco a la figura de Cristo Jesús y el mensaje que nos trajo. 

Creo (siendo esto no más que mi humilde opinión, respetando toda creencia y/o parecer y no significando con esto que lleve razón) que Cristo Jesús es alguien mundialmente conocido y, al mismo tiempo es el gran desconocido. Así pues, no está de más pararnos un poco y recordar el importante mensaje que Cristo Jesús nos trajo y también el que nos trajo Budha.

Podríamos haber tomado por referencia a cualquier otro maestro/a pero elegimos en este caso a Budha porque se suele relacionar mucho con el yoga. 

Dicho sea de paso, decir que el yoga no es religión, no tiene dogma. Lo que sí tiene es una Filosofía pero no tiene dogma. Es decir, se puede ser de cualquier religión, se puede ser ateo, se puede ser agnóstico y ser yogui. 

Budha nos habla de iluminación y nos dice que la iluminación es tomar conciencia de tu verdadera naturaleza y, le llama experiencia en Dios. Es la expresión de la paz, el amor, la felicidad, la unidad en ti. Así pues, nos habla de una práctica de vida que se trata de la práctica del aquí-ahora.

Budha nos dice: Dios soy Yo; Yo soy Dios cuando dejo de ser Yo.

Cristo Jesús, no habla de una gran transformación y, a esa transformación, le llama experiencia en Dios, nacer de nuevo. Nos habla de una resurrección en vida: morir en esta vida para nacer de nuevo en esta misma vida. Es decir, una transformación en una vida basada en el pequeño yo (físico, emocional) para una vida basada en el yo superior (tu verdadera naturaleza, tu esencia). Hablándonos también de una práctica de vida, tratándose también de la práctica del aquí-ahora.

Dos maestros distintos, en dos momentos de la historia también distintos, en dos lugares geográficos diferentes y el mismo mensaje.

Ambos nos hablan de una "transformación interna" y una "práctica de vida".